Actualmente un número cada vez mayor de españoles, personas físicas o jurídicas, se traslada a otros países, en especial a los países de lengua portuguesa, sea por motivo de trabajo, matrimonio, estudios, jubilación, entre otros.
Para que estos documentos surtan efectos en el extranjero, es imprescindible que estén debidamente legalizados. Esta legalización incluye la legitimación de las firmas que figuran en el documento por diversos organismos, Ministerios y Consulados antes de llegar a su país de destino.